Si hay un día en el que extrañamente consigues sacar un ratito para echarte la siesta, puedes estar seguro: te va a despertar la típica llamada comercial. No falla. Pero es que últimamente las empresas están empezando a llamar a horas intempestivas e incluso los fines de semana. A veces roza el acoso. Si tú también estás harto de recibir llamadas publicitarias y te has cansado de bloquear números, apuntarse a la Lista Robinson puede ser la solución que necesitas para que te dejen tranquilo (y para volver a echarte la siesta en paz). ¿Pero qué es esta lista y cómo funciona?
¿Qué es la Lista Robinson?
La Lista Robinson es un servicio gratuito de exclusión publicitaria en el que se pueden apuntar los consumidores para disminuir la publicidad que reciben. Está dirigido a la publicidad personalizada, es decir, la que está dirigida a su nombre. El responsable del tratamiento de los datos es Adigital (Asociación Española de la Economía Digital).
Una vez inscrito, el usuario puede indicar los medios a través de los que no quiere recibir publicidad: teléfono (móvil y fijo), correo postal, correo postal, SMS o MMS. De esta forma, solo podrán enviar publicidad aquellas empresas que tengan consentimiento expreso del titular, que en todo momento puede revocar la autorización. Asimismo, también podrán llamar las empresas de las que somos clientes.
Lo interesante de todo esto es que las empresas están obligadas legalmente a consultar la lista antes de llamar o enviar un mensaje. El coste de acceso al fichero depende del tamaño de la empresa, abarcando las tarifas de los 0 euros para las pymes a los 6.450 euros anuales para las prestadoras de servicios.
Si estamos inscritos, las empresas no podrán contactar con nosotros por motivos publicitarios. Si aun así el spam telefónico sigue fastidiándonos la vida, podremos acudir a la Agencia de Protección de Datos para que multe a la empresa en cuestión.
El problema es que la Lista Robinson no es infalible. De hecho, algunos usuarios que quejan de ciertas fugas de datos, aparte de la paradoja de dar nuestros datos a una empresa privada para evitar la publicidad no deseada y que esta a su vez cobre a otras compañías para mostrar esa información.
¿Y cómo me apunto a la Lista Robinson?
La inscripción en la Lista Robinson es muy sencilla. Tan solo hay que rellenar el formulario de la página web oficial y seguir las instrucciones. Luego hay que verificar el registro a través del correo electrónico y "banear" los canales a través de los que no queremos recibir publicidad.
Seguro que ya estás deseando darte de alta para no recibir más llamadas de spam y poder echarte la siesta tranquilo por una vez. No obstante, el registro puede tardar hasta dos meses en ser plenamente efectivo, ya que puede que alguna empresa esté utilizando nuestros datos en una campaña comercial activa.
Cualquier persona física se puede dar de alta en el servicio de la Lista Robinson de forma voluntaria y gratuita. Todo esto se complementa, además, con el acuerdo al que supuestamente llegaron este año las empresas telefónicas para acabar con las prácticas abusivas y fraudulentas para captar clientes. La cosa es que lo acaben cumpliendo.