El estadillo de la guerra entre Rusia y Ucrania es una terrible noticia con consecuencias dramáticas para la población. Pero en segundo plano también podemos esperar una situación devastadora para una maltrecha economía que no se había recuperado aún de los continuos reveses causados por la pandemia del coronavirus y las dichosas variantes de la COVID-19. ¿Cuáles son los principales efectos económicos que desencadenará la guerra entre Rusia y Ucrania?
La guerra entre Rusia y Ucrania hace tambalear la economía mundial
Hace unos días, cuando empezaban a llegar las primeras informaciones del avance militar ruso, las bolsas de valores ya se echaban a temblar. En los mercados ya se apreciaban movimientos significativos que no auguraban nada bueno. Pero esto es solo el principio, ya que aún se desconocen la duración y la intensidad en su alcance total. Aun así, los economistas advierten de que esto es solo un problema secundario, pues los mercados siempre acaban recuperando la estabilidad.
Más preocupantes son los efectos de la guerra entre Rusia y Ucrania en el contexto de una elevada inflación a escala global (que en España hoy se ha disparado al 7,4%). Y es que los precios podrían subir todavía más, especialmente si sufriéramos un más que posible corte parcial o total del suministro de gas. Esto conllevaría un incremento aún mayor del precio de la energía, a pesar de que la situación ya es insostenible. Obviamente, esto no se quedaría aquí, porque también tendría consecuencias en todos los sectores productivos de la economía.
Los economistas pronostican efectos a corto, medio y largo plazo. A corto plazo ya hemos visto los desastrosos resultados en los mercados, en la banca central y en la confianza de los inversores por el riesgo en los mercados. Asimismo, hoy el rublo se ha hundido y la economía rusa está al borde del colapso a causa de la imposición de las sanciones económicas que ya han puesto en marcha la Unión Europea, Reino Unido y Estados Unidos.
Luego llegará el turno de la subida del precio de las materias primas y sus derivados. Por último, los efectos a largo plazo podrían llegar a reconfigurar las economías y cambiar la geopolítica, derivando en una desglobalización y una regionalización del comercio.
¿Pero cuáles son los efectos económicos de la guerra entre Rusia y Ucrania para los españoles?
Durante los próximos meses, todas las economías europeas van a experimentar los efectos negativos del estallido de este conflicto bélico. Por supuesto, la economía española no se va a librar de las consecuencias. Subidas del precio de la luz, de la cesta de la compra, de los combustibles... No son problemas nuevos, pero se van a acentuar aún más. Solo queda esperar que las sanciones económicas a Rusia permitan que la duración de estas calamidades económicas sea temporal.
Se avecinan meses muy duros. El presidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), Antonio Garamendi, ha sido tajante: "Vamos a sufrir". Y eso sin dejar de tener presente el drama humano que está desencadenando la adicción al poder de una única persona que aterroriza a millones.