Poner en marcha un negocio, pagar una deuda, hacer frente a un imprevisto, aumentar el inventario... La gran mayoría de las empresas requieren una ayuda o impulso económico en algún momento de su trayectoria, especialmente en las fases iniciales. Cuando la cantidad que necesitan no es muy grande, suelen recurrir a la financiación a corto plazo. ¿Pero qué es y qué tipos existen?
¿Qué es la financiación a corto plazo?
La financiación a corto plazo es una modalidad de obtención de recursos económicos de manera rápida. De esta forma, los solicitantes pueden conseguir liquidez inmediata para realizar sus proyectos, cubrir imprevistos o pagar a sus proveedores.
Este tipo de financiación suele utilizarse para financiar el activo circulante y generalmente no tiene una duración superior a un año. Además, habitualmente no requieren aval, ya que se entiende que su riesgo es bajo. Se trata de una opción especialmente atractiva para las pymes debido a su rápida gestión y aprobación.
A través de la financiación a corto plazo las empresas pueden contar con efectivo para realizar sus operaciones comerciales diarias. El proceso de aprobación es más corto, pero suelen tener un tipo de interés elevado.
¿Qué tipos existen?
Existen diferentes tipos de financiación para las empresas. Algunos de los más habituales son los siguientes:
- Línea de crédito.
- Pagaré.
- Crédito comercial.
- Crédito bancario.
- Papel comercial.
- Financiamiento basado en inventarios.
¿Y si soy particular?
Si necesitamos conseguir dinero rápido a título personal, tenemos otras opciones de financiación a corto plazo. Y es que a veces necesitamos dinero y no podemos esperar. En esas ocasiones, recurrir al banco para pedir un préstamo no suele ser una opción a causa de los interminables plazos de aprobación.
Entonces, ¿qué podemos hacer? La solución más rápida y cómoda en esos casos son los préstamos online o microcréditos. Este método de financiación nos permite conseguir pequeñas cantidades de dinero prácticamente en el instante sin necesidad de salir de casa.
En AZLO podremos obtener hasta 300 euros en menos de 15 minutos. La gran ventaja es que los plazos y los requisitos se han reducido al máximo para poder llegar a un mayor número de clientes.
Si necesitamos dinero y lo necesitamos ya, los microcréditos son una solución a medida que nos ayudará a llegar a final de mes cuando más lo necesitamos. Solo hay que pedir ayuda.