Ahora que el coronavirus ha dejado la economía tiritando y la incertidumbre se apodera de las finanzas, cada día escuchamos más noticias económicas en los programas de televisión. En ellas nos bombardean con términos económicos que muchas veces no entendemos, como el IPC, la deflación, la productividad marginal del capital, el PIB o la balanza de pagos. Vayamos poco a poco. ¿Qué es la famosa balanza de pagos y cómo se divide?
Definición de balanza de pagos
La balanza de pagos es un índice o documento contable donde se registra el conjunto de transacciones económicas de un país con el resto del mundo en un tiempo determinado (normalmente, un año). Es decir, la balanza de pagos es la relación del dinero que entra y sale de un país, lo que nos indica si ese país está gastando más dinero del que genera (déficit) o si ingresa más de lo que gasta (superávit).
En este índice se incluyen todas las transacciones comerciales de bienes, servicios y capitales. Estos movimientos se realizan por parte de los habitantes del país, las empresas y el propio Estado, y el registro lo llevan a cabo los Bancos Centrales de cada país, como el Banco de España.
La necesidad de controlar la balanza de pagos procede de un mercado internacional globalizado. En la actualidad, las economías de todos los países se encuentra interconectadas. Con este índice podemos comprobar si un país está equilibrado en cuanto a ingresos y pagos.
¿Cómo se divide la balanza de pagos?
La balanza de pagos se divide en cuatro subbalanzas o cuentas, según el carácter de las transacciones recogidas: corriente, de capital, financiera y de errores y omisiones. Cada una de ellas cuenta con un saldo determinado, que se obtiene de la diferencia entre sus ingresos y los gastos generados.
La balanza de capital registra el movimiento de capitales, mientras que la balanza de cuenta financiera recoge los préstamos que pide un país al extranjero, así como las inversiones o depósitos que los países extranjeros efectúan a un país. Por su parte, la cuenta de errores y omisiones se realiza a causa de la dificultad que supone calcular con precisión el total de importaciones y exportaciones de un país. Por otro lado, la balanza por cuenta corriente de la balanza de pagos es la más importante, incluye las transacciones de bienes y servicios que entran y salen de un país y se subdivide en:
- Balanza de bienes y servicios. Antes estaban separadas, pero ahora se se agrupan y se subdivide en balanza comercial (exportaciones e importaciones) y balanza de servicios (operaciones con productos intangibles, como el transporte, el turismo, las comunicaciones...).
- Balanza de rentas. Incluye todos los ingresos y pagos generados por los factores productivos de un país (el capital y el trabajo). Pueden ser nacionales en el exterior o no residentes en el propio país.
- Balanza de transferencias corrientes. Se compone por las transferencias corrientes entre residentes y no residentes.