Hace ya algunos años que las fintech, las nuevas startups financieras, están redefiniendo la manera en la que los bancos, las aseguradoras y las empresas de préstamos funcionan. Esta revolución tecnológica de la industria financiera ha traído avances tecnológicos innovadores que ofrecen todo un mercado de soluciones digitales al alcance del gran público. Pero la función de las fintech va mucho más allá, e incluso han conseguido promover el uso de la tecnología en África.
El creciente desarrollo de la tecnología y las fintech en África
Cuando pensamos en África seguramente la palabra "fintech" no sería una de las primeras que se nos vienen a la mente. En las economías de los países más desarrollados las fintech se centran en la disrupción para ofrecer métodos alternativos para los usuarios de servicios financieros. Sin embargo, la falta de infraestructuras en países como África ha convertido a las fintech en proveedoras de servicios inexistentes o ineficientes hasta la fecha. Este impulso de la tecnología está ayudando a cerrar ciertas brechas estructurales de la economía.
Al mismo tiempo, el uso de los dispositivos móviles ha permitido que los africanos se conviertan en consumidores de servicios fintech. Además, los emprendedores tecnológicos de África están lanzando un número récord de nuevas empresas y se están realizando unas inversiones sin precedentes. Por supuesto, para los inversores esto es un caramelito, pues saben que es una oportunidad ideal para sumarse al pelotazo de la revolución del sector en el continente africano.
Tecnología y fintech en África: casos de éxito
Pero veamos esto con algunos ejemplos. Hace tan solo unas semanas, Stripe, la empresa tecnológica de California compró la nigeriana Paystack por 200 millones de dólares. Ambas empresas integran los servicios de pagos en una transacción online y offline a través de una API, y ahora planean expandir sus servicios en África.
Durante este año, el impulso de la tecnología y las fintech en África ha seguido su camino ascendente. Sin embargo, los disturbios en Lagos y la crisis del coronavirus podrían desacelerar el récord de inversiones que se ha producido en 2019 y la primera mitad de este año.
De hecho, los inversores de riesgo inyectaron más de 1.300 millones de dólares en nuevas empresas con sede en África en 2019, lo que supuso un notable incremento respecto a 2018. Se estima que hasta el 82% de ese dinero de capital de riesgo se invirtió en nuevas empresas en Kenia y Nigeria.
Son numerosas las empresas africanas de tecnología financiera que han recaudado más de 100 millones de dólares en los últimos años. Además, la empresa nigeriana Jumia (conocida habitualmente como "el Amazon de África") se convirtió el año pasado en la primera startup africana en cotizar en un importante intercambio global a través de la Bolsa de Nueva York.
Gran parte de esta actividad la acaparan las fintech, pero también se han producido logros importantes en otros sectores, como la atención médica, la agricultura, el transporte o la biotecnología. Además, la limitada cartera de desarrolladores de software africanos también está ampliándose. Este impulso beneficiará a los emprendedores de todo el continente.