Todos tememos ese terrible momento de ir a la gasolinera. Nuestro coche empieza a tragar y tragar y tragar y parece que aquello no tiene fin. Y, mientras tanto, vemos girar a lo loco el indicador del precio. A pesar de que el precio del carburante ha bajado durante la crisis del coronavirus, es imposible no preocuparse cada vez que repostamos. Sin embargo, saber de antemano lo que consume nuestro coche antes de acercarnos a la gasolinera nos permitirá ahorrar dinero y evitar sustos. ¿Pero cómo podemos calcular el consumo del combustible de nuestro vehículo?
Pasos para calcular el consumo de combustible de un vehículo
¿Quieres saber cuánto combustible gasta tu coche? Si sigues estos pasos podrás calcularlo fácilmente.
- Llena el depósito de tu vehículo hasta arriba.
- Reinicia el cuentakilómetros parcial del vehículo. Si nuestro coche no tiene esta función, solo tenemos que apuntar el número de kilómetros que marca el contador antes de salir de la estación de servicio.
- Circula con normalidad hasta que salte el temido indicador de la reserva.
- Vuelve a llenar el depósito por completo y anota los litros de combustible que has echado.
- Ahora es el momento de sacar la calculadora y hacer una regla de tres para saber combustible consume nuestro vehículo cada 100 kilómetros. Por ejemplo, si nuestro depósito tiene una capacidad de 50 litros y hemos podido recorrer 800 kilómetros, solo tenemos que hacer esta cuenta: 50 / 800 x 100 = 6,25 litros cada 100 kilómetros.
Por supuesto, nos podremos saltar todos los pasos previos si ya conocemos las características técnicas de nuestro vehículo. Además, los últimos modelos incorporan una herramienta que nos indica directamente cuánto combustible hemos gastado los últimos 100 kilómetros. No obstante, esta cantidad depende mucho de la conducción, ya que no es lo mismo circular por vías urbanas que por autovías, por ejemplo.
Trucos para reducir el consumo de combustible de nuestro coche
Ahora ya sabemos lo que consume nuestro vehículo: mucho. ¿Pero hay alguna manera de ahorrar en gasolina? Pues sí. Para empezar, es recomendable conducir de manera eficiente, no dar acelerones bruscos y, si nuestro coche es manual, llevar la marcha que corresponda a la velocidad.
También es importante comprobar a menudo el estado de las neumáticos y el aire de las ruedas, así como realizar los mantenimientos periódicos del vehículo. Además, la mayoría de gasolineras cuentan con tarjetas de fidelidad que, a la larga, nos permiten ahorrar algo de dinero. Tal vez solo sean unos céntimos o unos euros, pero son muy bienvenidos.
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