En los últimos días estamos oyendo hablar mucho de los "coronabonos". Varios países de la Unión Europea, incluyendo España, han solicitado a Bruselas la emisión de unos eurobonos especiales con el fin de crear un instrumento de deuda común para combatir los estragos del COVID-19. El objetivo es movilizar recursos al menor coste posible. ¿Podrían ser los coronabonos la solución a la crisis económica del coronavirus?
Los coronabonos: La deuda común europea
La pandemia del coronavirus ha cambiado radicalmente nuestras vidas de la noche a la mañana. Mientras nos preocupamos por el presente y por solucionar el problema cuanto antes, algunos echan la vista tímidamente hacia el futuro. ¿Qué va a ser de la economía mundial cuando volvamos a salir a la calle? De momento las perspectivas son inciertas, pero hay una cosa clara: todos los países afectados por el coronavirus van a necesitar dinero. Mucho dinero. Y eso implica contraer deuda.
Los mercados de valores dan coletazos cada vez que se anuncia un nuevo paquete de medidas urgentes, pero no parece suficiente para solucionar el frenazo que ha sufrido la economía a nivel internacional. Por eso, se están empezando a barajar otras alternativas.
Hasta este momento, cada país se encargaba de emitir sus propios bonos y pagar su propia deuda. Era una batalla nacional que cada país luchaba por separado. Pero situaciones extraordinarias requieren medidas extraordinarias. El pasado martes, la presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde, pidió a los ministros de Finanzas de la eurozona que consideren seriamente la emisión de una deuda conjunta: los coronabonos.
A través de los coronabonos, los países de la UE podrían solicitar fondos económicos y establecer un sistema solidario para devolver el capital. El BCE sería el encargado de comprar estos títulos, ofreciendo una manera alternativa para que los países se financiaran a un coste más bajo que si hicieran su guerra por separado.
De esta forma, todos los países miembros se endeudarían en conjunto y se reducirían los riesgos de devolución. Para España esto se traduciría en una disminución de los intereses del préstamo y, al mismo tiempo, no acumularía más deuda propia.
¿Cuál es el beneficio de los coronabonos?
La emisión de deuda conjunta de coronabonos sería una medida excepcional debido a la gravedad de la situación. Mientras Alemania, los Países Bajos y otros países del norte de Europa se oponen a esta propuesta, varios países miembros de la Unión Europea (entre los que se encuentra España), han enviado una carta al presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, para que se empiece a trabajar en este instrumento de deuda conjunta europea.
En esta carta se argumenta que las medidas extraordinarias que se han tomado para contener el virus están afectan a nuestras economías a corto plazo. Por lo tanto, solicitan que se tomen medidas extraordinarias que limiten el daño económico y se puedan empezar a preparar los siguientes pasos.
“Si queremos que la Europa del mañana esté a la altura de las aspiraciones de su pasado, debemos actuar hoy y preparar un futuro común”, declaran. Además, los presidentes de estos países han pedido que se estudien otras medias adicionales, como aprobar una partida específica en los presupuestos de la Unión Europea para combatir los efectos del COVID-19. Y tampoco nos podemos olvidar del fondo solidario que los países miembros crearon para emergencias, aunque ahora mismo no parece una solución óptima.
¿Para qué sirven estos bonos?
La intención de crear este instrumento iría encaminada a financiar las inversiones en sanidad y las medidas temporales extraordinarias, con el fin de proteger las economías europeas y los modelos sociales. Sin embargo, la emisión de bonos comunitarios no tiene precedente y tampoco existe una gran certeza al respecto.
Además, el presupuesto de la Unión Europea es limitado y no puede emitir deuda, lo que significaría que habría que recurrir al fondo de rescate, el Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE), que podría llegar a emitir hasta 410.000 millones en coronabonos. ¿Pero estarán todos los países a favor de compartir la factura?