Buscar trabajo no es fácil y, por lo general, no suele ser agradable. La mayoría de las personas tienen que experimentar muchos rechazos hasta conseguir un empleo. A veces, según nuestras circunstancias, tal vez lo más apropiado sea dejar la búsqueda en manos de una empresa de trabajo temporal (ETT). ¿Pero qué son las empresas de trabajo temporal y qué tipos de contratos ofrecen?
¿Qué son las empresas de trabajo temporal?
Las empresas de trabajo temporal o ETT son consultoras de recursos humanos especializadas en empleos de duración determinada. Estas compañías actúan como intermediarias entre trabajadores y empresas. Su actividad esencial consiste en poner a disposición de una empresa usuaria a trabajadores contratados por la propia ETT de forma temporal. Para ello han de realizar un contrato de puesta a disposición.
Es decir, las ETT contratan a sus trabajadores, que luego ceden a otras empresas. Además, la propia ETT se encarga de pagar al trabajador y los gastos correspondientes, como las cotizaciones a la Seguridad Social, la sustitución por absentismo o la formación.
Sin embargo, los clientes de las empresas de trabajo temporal no son los trabajadores, sino las compañías usuarias. Estas acuden a las ETT para que las ayuden a resolver necesidades de personal o solicitar apoyo en la gestión de recursos humanos.
Las ETT están férreamente reguladas en la Ley 14/1994, entre otra normativa específica. Sus servicios están tradicionalmente rodeados de polémica por las condiciones de sus empleados, si bien es cierto que contribuyen a la creación de empleo.
¿Qué tipos de contratos ofrecen las empresas de trabajo temporal?
Según se establece en la ley, las ETT solo pueden ofrecer contratos de carácter temporal. Este tipo de contratos se suelen realizar cuando una empresa tiene necesidades puntuales de aumentar su plantilla. Según las necesidades de la empresa, se ofrecerán los siguientes contratos:
- Por obra y servicio. Su duración se determina por la concreta obra o servicio.
- Eventual o por circunstancias de la producción. Tiene una duración máxima de seis meses dentro de un periodo de 12, aunque puede prorrogarse sin superar el año de duración en un periodo de 18 meses.
- Interinidad. Este contrato no puede durar más de tres meses y sirve para para sustituir a un trabajador de una empresa con derecho a la reserva del puesto de trabajo.
- Temporal. Se trata de un empleo para cubrir de forma temporal un puesto de trabajo permanente mientras se realiza un proceso de selección o una promoción de personal.
- Prácticas. En los mismos supuestos y con las mismas condiciones y requisitos en que una empresa podría celebrar un contrato de trabajo en prácticas o un contrato para la formación y el aprendizaje.
¿Qué trabajos no pueden ofrecer las empresas de trabajo temporal?
Por el contrario, no se puede realizar un contrato de puesta a disposición en ciertos casos. La ley recoge estos supuestos:
- Sustitución de trabajadores en huelga.
- Realización de trabajos u ocupaciones especialmente peligrosos para la seguridad y salud en el trabajo.
- Cobertura de puestos o funciones que hayan sido objeto de amortización por despido improcedente, por extinción del contrato por voluntad del trabajador fundada en un incumplimiento contractual del empresario, despido colectivo o por causas objetivas en los 12 meses anteriores.
- Cesión de trabajadores a otras empresas de trabajo temporal.
¿En qué se diferencia una ETT de una agencia de colocación?
La diferencia principal entre una ETT y una agencia de colocación es que las ETT pueden ceder a sus trabajadores, pero las agencias no. Ambos organismos son intermediarios, pero las agencias de colocación solo ponen en contacto a los candidatos con las empresas, mientras que las ETT contratan a los propios candidatos.
Además, los orientadores laborales de las agencias de colocación trabajan bajo las directrices del Servicio Público de Empleo (SEPE). No obstante, a veces las ETT también colaboran con el SEPE.