Desde la irrupción del coronavirus, las grandes empresas galas están realizando operaciones clave en España. Así, las inversiones francesas han aumentado considerablemente en los últimos meses. ¿Pero por qué los grandes grupos galos están apostando por ciertos sectores estratégicos al sur de su frontera cuando no se están produciendo movimientos en sentido inverso?
¿Por qué están invirtiendo los franceses en España?
El pasado 15 de marzo se celebró en la ciudad francesa de Montauban una cumbre hispano-francesa. Los presidentes Pedro Sánchez y Emmanuel Macron acordaron colaborar para relanzar la economía tras la pandemia del coronavirus. Su propósito es triple: conservar la autonomía estratégica de las opciones económicas e industriales, controlar mejor las cadenas de suministros y también realizar la necesaria transición ecológica y digital de sus respectivas economías.
Es decir, que pretenden estrechar lazos para hacer un frente conjunto a la COVID-19. Precisamente desde que empezó la pandemia, las inversiones francesas están aumentando nuestro país. De esta forma, las grandes compañías galas están invirtiendo en sectores estratégicos españoles. Los más importantes son la construcción, la tecnología, los medios de comunicación o la distribución alimentaria.
Algunos ejemplos son Carrefour (que ha absorbido las tiendas Supersol), Total (que ha comprado activos de EDP) o Vivendi (que ha elevado hasta el 9,9% su participación en el Grupo PRISA). Además, Orange quiere participar en el proceso de fusiones de las empresas de telecomunicación españolas, y el fondo Ardin está investigando oportunidades en varios sectores.
Pero hay muchos más casos. La promotora de centros comerciales Unibail-Rodamco, el grupo de supermercados Auchan, el fabricante de automóviles Stellantis (la unión de PSA y Citröen), el grupo industrial Vinci o LVMH (el dueño de Loewe) son otras de las grandes empresas francesas con presencia en España.
Hasta el momento, no hay compradores franceses en ninguna de las últimas ofertas públicas de adquisición (las llamadas opas) sobre empresas españolas. Sin embargo, sí que hay financiación gala detrás, como el banco BNP Paribas, que avala las ofertas de IFM sobre Naturgy.
Inversiones francesas versus inversiones españolas
Según datos del Ministerio de Industria, en 2020, las inversiones francesas en España alcanzaron los 2.538 millones de euros, mientras que las inversiones españolas en Francia solo fueron de 312 millones. Ahora mismo, Francia es el tercer país con más inversión acumulada en España, solo por detrás de Estados Unidos y Reino Unido.
¿Pero por qué los inversores españoles no apuestan por las empresas francesas? La mayor operación que se ha realizado en 2021 es la compra de la adquisición de la sociedad francesa de torres móviles Hivory por Cellnex, valorada en 5.200 millones de euros. Entre las grandes empresas españolas del IBEX 35, esta es la que más presencia tiene en Francia.
Mientras tanto, los grandes grupos españoles están fijando su rumbo hacia Latinoamérica, Estados Unidos y Reino Unido. No obstante, algunos economistas explican la falta de inversión española en Francia por la supuesta rigidez de los franceses, que quieren involucrarse en todas las negociaciones desde el principio, por pequeña que sea.
Ahora mismo, una de las normativas poscoronavirus permite que el Gobierno español pueda vetar compras desde países de la Unión Europea. Si no se prorroga tras el 30 de junio, podrían producirse más inversiones francesas en España en los próximos meses.