La COVID-19 lo está trastocando todo. No sabemos hablar de otra cosa, el monotema lo invade todo y ya nos está empezando a pasar factura a nivel psicológico. Seguro que tú también te escandalizas cuando ves películas y la gente se toca sin ningún tipo de cuidado. ¡Y sin guantes ni mascarillas! Por eso no es de extrañar que el coronavirus también haya afectado al mercado de los préstamos personales.
Hace unos días hablábamos del impacto contradictorio que está teniendo la pandemia en los créditos. Por un lado, los prestamistas están endureciendo las condiciones para conseguir un crédito. Las perspectivas económicas no son demasiado positivas. Por otro lado, muchos particulares están sufriendo problemas financieros y necesitan una ayuda para llegar a final de mes. Sin embargo, ahora mismo nadie está pidiendo grandes préstamos para comprar una casa o un coche.
Durante estas últimas semanas los servicios de financiación online y las fintechs han visto como su demanda crecía exponencialmente. Los microcréditos o minipréstamos se han convertido en un salvavidas para muchas personas. Pero echemos un vistazo a los mercados financieros de todo el mundo para ver cómo está influyendo el coronavirus en el sector de los préstamos personales y los créditos.
Asia
La prestación de servicios financieros en remoto ha aumentado como consecuencia de la pandemia. Entre estos servicios, las soluciones de financiación online son los más demandadas, abarcando un 23% de las búsquedas digitales realizas en Vietnam, Filipinas, Indonesia y la India. Por otro lado, otros términos que han aumentado su popularidad en las últimas semanas han sido el comercio electrónico, las herramientas de pagos digitales de facturas para servicios públicos y las apps de banca en línea, así como las carteras digitales y móviles.
Asimismo, también ha aumentado significativamente la demanda de financiación a través de fintechs. De esta forma, en Vietnam la solicitud de estos servicios ha aumentado un 38%, mientras que en Indonesia ha subido un 52%. El aumento ha sido más moderado en la India, con un 7%. Sin embargo, al mismo tiempo, el confinamiento global ha frenado esta tendencia por la limitación de las necesidades básicas y los productos esenciales.
Estados Unidos
La pandemia está afectando severamente a Estados Unidos. Las medidas de confinamiento han desplegado unos efectos desastrosos inmediatos para la economía americana. Para paliar esta crisis financiera, el Gobierno de los EEUU ha aprobado la CARES Act, configurándose como el mayor estímulo económico de la historia moderna.
En este ambiente, los prestamistas estadounidenses han ido limitando su número de clientes desde mediados de marzo. En otras palabras: con el coronavirus es más difícil acceder a los préstamos. Su principal preocupación son los incumplimientos y seguir apoyando a sus usuarios durante los próximos meses. Asimismo, aquí también ha bajado la demanda de préstamos personales a causa de la pérdida de confianza del consumidor y de la imposibilidad de adquirir ciertos productos y servicios en estos momentos.
Reino Unido
En el Reino Unido las solicitudes de préstamos personales se han reducido del 30 al 40% a causa del coronavirus. Los expertos apuntan como principales motivos la incertidumbre económica y la pérdida de confianza del consumidor debido a la inseguridad laboral. Además, las cosas que tradicionalmente se suelen adquirir a través de créditos son inaccesibles ahora mismo a causa de las medidas de aislamiento.
Por eso era de esperar que los prestamistas del Reino Unido también limitaran su oferta de crédito. Algunos de ellos han pausado sus préstamos por completo, mientras que otros están rechazando las solicitudes de préstamo a los consumidores que trabajan por cuenta propia o a clientes que trabajan en sectores de alto riesgo, como el turismo.
Por otro lado, el 2 de abril la FCA (Financial Conduct Authority) propuso algunas medidas temporales para ayudar a los operadores de productos financieros. Algunas de sus propuestas incluyen las congelaciones temporales de pagos en préstamos y tarjetas de crédito.
Polonia
Polonia ha sufrido los efectos de la COVID-19 con menor intensidad que otros países europeos. La intervención rápida del Gobierno cerrando escuelas y fronteras a principios de marzo fue clave para detener la propagación de un virus que parece imparable. Sin embargo, las limitaciones al movimiento de las personas han puesto al país en un estado similar al del bloqueo total de otras regiones.
Una de las medidas impuestas por el Gobierno ha puesto un límite a las tarifas que los prestamistas pueden cobrar por los préstamos nuevos. La consecuencia directa ha sido un cierre temporal de la mayoría de los servicios de préstamo mientras actualizan sus sistemas y productos para reflejar los nuevos límites. Se espera que algunos prestamistas tengan que retirarse del mercado, lo que seguramente aumentará la presión sobre la oferta de préstamos personales en Polonia.
Australia
El coronavirus ha tenido un menor impacto en Australia. Aunque se han impuesto medidas y controles, no son tan severos como los de otros países. Aquí la demanda de préstamos personales sigue siendo alta y se espera que los criterios responsables de préstamo se centren en la estabilidad de los ingresos en los próximos meses.