Los científicos de todo el mundo están luchando una batalla contra los límites de lo posible para encontrar cuanto antes una vacuna o un tratamiento que frente los avances del coronavirus en el mundo. ¿Y si nos dijeran que la solución podría pasar por algo tan sencillo como los huevos de gallina? Así lo sostiene un científico del CSIC que ha presentado una crema profiláctica hecha a base de yema de huevo que podría protegernos temporalmente frente al coronavirus cuando no llevemos mascarilla. ¿Pero cómo funciona? ¿Cuándo se podrá comprar? ¿Es un proyecto factible?
El huevo contra el coronavirus
El científico del CSIC José Manuel Pérez de Alastra es el encargado de este espectacular avance. Gracias a la crema profiláctica que ha desarrollado, podríamos estar protegidos frente al coronavirus cuando no llevemos mascarilla. Por ejemplo, cuando estemos comiendo, cuando hagamos ejercicio o cuando nos tomemos algo en la terraza del bar.
Esta crema profiláctica es una pomada de ingestión oral hecha a base de yema de huevo con anticuerpos contra la COVID-19. Tras superar los tests de eficacia, se ha demostrado que los anticuerpos ingeridos permanecen hasta dos horas en la boca y en la saliva.
Pérez de Alastra ha trabajado con el cocinero Diego Schattenhofer, afincado en Arona (Tenerife). Su creación ha sido presentada en el evento San Sebastián Gastronómika, celebrado la semana pasada y centrado en la pandemia del coronavirus.
¿Por qué los huevos de gallinas podrían protegernos frente al coronavirus?
José Manuel Pérez de Alastra y su equipo llevan varios años trabajando con anticuerpos desarrollados en gallinas. "Cuando la gallina es inmunizada, concentra los anticuerpos en la yema del huevo, un alimento que, al ser natural, se puede administrar por vía oral, porque estos anticuerpos no pasan a la sangre", explica.
Esta crema nos protegería impidiendo que el virus se adhiera a nuestras células. "La pomada dispersa gradualmente anticuerpos por la cavidad oral y continúa diseminándolos a su paso por la faringe y el esófago. Si el virus entra en el organismo los anticuerpos lo atraparán y rodearán impidiendo la infección. El virus es arrastrado hacia el estómago, donde los jugos gástricos lo destruirán".
El consumo de medio gramo de esta pomada bastaría para generar una inmunidad de dos horas frente a la COVID-19. Por lo tanto, su consumo parece cómodo y factible. ¿O no?
¿Cuándo se podría utilizar esta crema a base de huevo para luchar contra el coronavirus?
Si se aprueba el uso de esta crema profiláctica, la idea del cocinero es introducirla en ciertas salsas alimenticias o pomadas gastronómicas, como un "mojo inmunizado", lo que provocaría la profilaxis de la garganta. Además, se muestra esperanzando, ya que este avance científico podría ayudar al mundo de la hostelería, que tanto daño ha sufrido con la pandemia del coronavirus.
¿Pero cuándo podría estar lista la crema profiláctica? La ciencia no es magia y todas las investigaciones requieren tiempo. De esta forma, el científico indica que se tardaría al menos dos años en desarrollar.
Sin embargo, el CSIC ha dejado claro que este proyecto no está financiado por la agencia y su desarrollo todavía está en un estadio muy preliminar. De hecho, este organismo "desea transmitir que la pomada de ingestión oral a base de yema de huevo con anticuerpos contra la COVID-19, sobre la que han informado diversos medios, es una propuesta para la cual no existe actualmente evidencia científica que soporte los resultados que se indicaban sobre su eficacia contra la COVID-19”, advierten. Habrá que seguir esperando.
