Ahorrar dinero es difícil, pero no imposible. Sin embargo, todos hemos notado alguna vez que nuestros esfuerzos de ahorro no daban los resultados esperados. Muchas veces, la causa puede ser el agujero en el bolsillo provocado por los gastos hormiga.
¿Qué son los gastos hormiga?
Un café de máquina, los pequeños vicios, las compras impulsivas, comer fuera de casa, los antojos al hacer la compra... Estos pequeños gastos diarios que parecen insignificantes pueden llegar a crear un gran agujero en nuestra hucha.
Los gastos hormiga son compras de importes pequeños que realizamos frecuentemente y que por regla general no necesitamos. Es decir, que se trata de consumos que no son malos de manera aislada, pero podrían ser un problema para nuestras finanzas personales cuando se convierten en costumbres repetitivas.
Principales características
Los gastos hormiga son bastante fáciles de detectar en cuanto nos paramos a pensar un poquito. Sus características fundamentales son las siguientes:
- Importes pequeños.
- Gastos cotidianos a los que no damos importancia.
- Gastos periódicos o frecuentes.
- No están planificados en el presupuesto y muchas veces son compras por impulso.
- Generalmente, son compras de cosas que no necesitamos.
Cómo identificar un gasto hormiga
Imagina que todos los días te compras un café para llevar en una cafetería. Tal vez dos euros no te parezcan un gasto relevante, pero si empiezas a sumar el importe diario, al final de mes te habrás gastado unos 60 euros en café. Si lo hubieras preparado en casa, seguramente podrías haber ahorrado bastante dinero. No obstante, seguramente ni te hayas parado a pensarlo.
Pues bien, si queremos evitar esos gastos hormiga que convierten nuestra cuenta bancaria en una regadera, debemos aprender a identificarlos. El método más sencillo es el siguiente:
- Registra todos tus gastos diarios en una tabla, incluyendo el tipo de consumo y el precio.
- Suma el gasto de los consumos innecesarios de la semana.
- Haz una previsión de los gastos hormiga mensuales y anuales para entender cuánto dinero estás gastando realmente.
Si volvemos a nuestro ejemplo del café, gastaremos 730 euros en café al año. Si queremos ahorrar dinero, tal vez lo más sensato sería invertir en una cafetera.
Cómo evitar perder dinero con los gastos hormiga
Ahora ya deberías saber cuánto dinero se te va en gastos hormiga. Es hora de hacer algo para limitarlos. El plan de acción para evitar los gastos hormiga comienza por identificarlos, ser conscientes de las cosas que compramos y llevar un control de gastos. Lo siguiente es empezar a aplicar estos consejos financieros:
- Prepara un presupuesto con una previsión de ingresos, gastos y ahorro.
- Destina parte de tus ingresos mensuales a los gastos hormiga y no sobrepases la cuantía.
- Procura llevar tu comida al trabajo: es más sano y gastarás menos dinero.
- Opta por desplazarte caminando, en bicicleta o en transporte público siempre que sea posible.
- Cancela las suscripciones de servicios que no usas, como el gimnasio, las plataformas de streaming o las apps móviles.
- Ve al supermercado con la lista de la compra preparada: es más económico y más sostenible.
- Declara la guerra a las compras impulsivas.
- Guarda el cambio y las monedas sueltas en un bote o utilízalas para apuntarte a un reto de ahorro.
Ahora bien, una vez dicho todo esto... Controlar los gastos hormiga no implica que no podamos permitirnos un capricho de vez en cuando. El objetivo es evitar el despilfarro y ahorrar dinero para mejorar nuestra salud financiera, no restringir cualquier tipo de alegría o permitirnos un antojo de vez en cuando. Porque a veces también necesitamos gastar dinero para darnos un gusto.