¿Se te va el dinero todos los meses y no sabes por qué o en qué? Tal vez tu problema (o parte de él) sean los gastos fantasma. En las siguientes líneas te ayudamos a identificar y evitar los gastos fantasma para mejorar tu salud financiera sin necesidad de hacer grandes esfuerzos.
¿Qué son los gastos fantasma?
Los gastos fantasma son, junto a los gastos hormiga y a los gastos vampiro, los grandes enemigos del ahorro. Se trata de gastos "ninja" que van dilapidando nuestros ahorros sin que nos demos cuenta... hasta que es demasiado tarde.
En concreto, los gastos fantasma son aquellos gastos que abonamos mes a mes sin darnos cuenta. Por lo general, suelen estar relacionados con suscripciones mensuales o esas cosas que compramos "por si acaso". Los más habituales son los siguientes:
- Suscripción a servicios de streaming de películas y series (por ejemplo, Netflix, Disney+, HBO Max...).
- Suscripción a otros servicios por streaming (como Amazon Prime, Spotify, Kobo Books, Domestika...).
- Servicios premium de apps móviles.
- Suscripción al gimnasio que nunca vamos.
- Seguros que no se usan.
7 trucos para evitar los gastos fantasma y ahorrar dinero
Todos somos víctimas de los gastos fantasma. Por suerte, es muy fácil identificarlos para mantenerlos a raya, incluso más que los gastos hormiga o los gastos vampiro. Para ello, podemos poner en práctica los siguientes trucos:
- Haz una lista de todas las suscripciones que pagas periódicamente (pueden ser mensuales, trimestrales, anuales...) y pregúntate cuáles son esenciales.
- Cancela ahora mismo todas las suscripciones y seguros que no utilizas. No lo dejes para más tarde.
- Sanea tus finanzas y prepara un presupuesto. Si necesitas dinero para poner en orden tu salud financiera, los microcréditos online te permiten obtener financiación rápida. De hecho, si pides tu préstamo ahora, podrás conseguir hasta 300 euros en menos de 15 minutos para hacer borrón y cuenta nueva.
- Planifica las compras y suscripciones que realmente te prestan un servicio útil.
- Busca alternativas de ocio gratuitas antes de suscribirte a un nuevo servicio de streaming.
- Comprueba si hay apps móviles que ofrezcan el mismo servicio sin necesidad de pagar un modo premium.
- Llama a tu aseguradora para ajustar el precio de tus seguros, limitar lo que cubre la póliza o directamente cancelar el seguro si realmente no lo necesitas.