Las criptomonedas llevan entre nosotros más de diez años, pero todavía están rodeadas por mucho misticismo y desconocimiento. Hoy en día es posible pagar con ellas en algunos comercios e incluso podemos intercambiar dinero físico por divisas virtuales a través de cajeros automáticos. Veamos qué son las criptomonedas y para qué sirven.
Criptomonedas: Definición y origen
Las criptomonedas, criptodivisas, criptoactivos o bitcoins son unas monedas virtuales que surgieron como un medio de intercambio digital. Es decir, no existen físicamente. Su sistema utiliza la criptografía para asegurar las transacciones, controlar la creación de nuevas criptomonedas y asegurar la transferencia de activos.
Se configuran como un tipo de divisa alternativa que es independiente de los bancos centrales u otras entidades. Esto significa que las criptomonedas no están respaldadas por ningún gobierno, por lo que no gozan de la misma protección que el dinero depositado en una cuenta bancaria. Para controlar cada una de estas monedas se utiliza una base de datos descentralizada, normalmente una cadena bloques, también llamada blockchain.
La primera criptomoneda fue Bitcoin, que empezó a operar en 2019. Hoy en día existen otras de diferentes características, como Ethereum o Dogecoin.
¿Cuánto vale una criptomoneda?
El valor de las criptomonedas es cambiante, al igual que el de cualquier otro tipo de divisa. A fecha de 18 de diciembre, el valor de un Bitcoin es de unos 18.500 euros. Sin embargo, justo una semana antes, su valor era de unos 15.000 euros. Además, como no existe una única plataforma donde comerciar con criptomonedas, no existe un precio único.
¿De dónde salen?
Habitualmente, se dice que las criptomonedas se minan. Para obtenerlas es necesario utilizar potentes sistemas informáticos que nos permitan descubrir el hash que protege los bloques del blockchain. A través de este hash podemos transformar un elemento en otro utilizando un algoritmo.
De esta forma, se pueden abrir los bloques y conseguir la "recompensa" de su interior, dejándolo vacío para que se pueda usar. Este proceso se conoce como minar criptomonedas. El problema es que, cuanto más larga sea la cadena de bloques, el sistema se volverá cada vez más complicado, por lo que necesitaremos equipos más y más potentes.
Además, hay que tener en cuenta que un montón de máquinas compiten al mismo tiempo. Por lo tanto, descubrir la siguiente criptomoneda es, a día de hoy, extremadamente complicado sin tener una enorme potencia de cálculo.
¿Cómo conseguir criptomonedas?
Para comprar criptomonedas lo primero que necesitaremos será un monedero digital o crypto wallet para almacenar nuestros activos. Este monedero es un software que nos da acceso a los blockchains de cada moneda y nos permitirá realizar diversas acciones, como consultar el balance de nuestra cuenta o recibir y enviar divisas.
Una vez tengamos el monedero, podremos comprar criptomonedas directamente desde nuestro crypto wallet, pero también en plataformas virtuales, en el Forex (el mercado de divisas), a través de ciertas tarjetas de débito y comerciando directamente con un particular. No obstante, antes de comprar criptomonedas tenemos que verificar la seguridad de nuestro monedero virtual y la cantidad de las comisiones de las transacciones. Además, las monedas virtuales son extremadamente volátiles, por lo que puede ser una inversión peligrosa si no comprendemos el mercado.