Si algo nos ha demostrado la nueva normalidad es que se puede vivir de nuevo de la terraza, los encuentros en bares y del pasarse la tarde-noche sin salir del barrio. Pero llevamos mucho tiempo confinados para no darle a nuestro fin de semana un toque especial, ¿verdad? Estés de vacaciones o no, te proponemos las mejores escapadas rurales hacia destinos a menos de dos horas de Madrid donde huir del mundanal ruido.
Escapadas a menos de 40 minutos
Ya es fin de semana y el cuerpo lo sabe. Lánzate a estas escapadas cerca de Madrid, aptas para todos los bolsillos y olvida el estrés, especialmente si la mayoría de tus planes del verano 2020 se han truncado. Hay muchos pueblos maravillosos alrededor donde disfrutar de minivacaciones cada semana.
Alcalá de Henares: Historia y gastronomía
Esta histórica ciudad desprende encanto por cada rincón. Sus aceras adoquinadas alojan soportales donde se cobijan las terrazas. Sus casas típicamente cervantinas lindando con palacios. Y sus plazoletas con encanto a cada paso del camino como los monumentos de primer nivel. La ciudad presume de que la Universidad de Alcalá de Henares es Patrimonio de la Humanidad. En su Paraninfo del siglo XVI, cada 23 de abril, los Reyes hacen entrega del Premio Cervantes de Literatura. Pero no es la única ilustre institución educativa: la Universidad Cisneriana y el Colegio Mayor San Ildefonso -en cuya Capilla de decoraciones geométricas está enterrado el Cardenal Cisneros- bien merecen la visita.
Después te quedarán aún la Casa-Museo Cervantes y la plaza del mismo nombre, el Palacete de Laredo y el Palacio Arzobispal. También el Museo Arqueológico y una larga lista de actividades como la ruta gastronómica. Para planear bien tu escapada a Alcalá de Henares, visita antes su estupenda web de turismo y entérate de todo lo que puedes hacer en un fin de semana cerca de Madrid.
Navacerrada: Escapadas a la buena vida de montaña
Es una localidad que merece la pena visitar en todas las épocas del año. En invierno por su cercanía con la estación de Valdesquí, situada en pleno Puerto de Navacerrada. Y en verano, para hacer rutas senderistas como la que parte del mismo puerto hacia la Bola del Mundo (aprox. 1 hora) o el ascenso a La Maliciosa (aprox. 2 horas). En esta última, podrás disfrutar de estupendas piscinas naturales en el camino.
El pueblo invita a un paseo relajado y bastante más fresquito que a lo que estamos acostumbrados en Madrid. Empieza por recorrer sus calles empedradas de casas con travesaños de madera y balcones floridos. Terminarás en el embalse, bien surtido tras la lluviosa primavera, con una vista espectacular del pueblo y las montañas. Te recomendamos que para comer reserves bien en El Portillón o La Raclette. Ambos restaurantes pertenecen a la misma familia local, y la calidad de su comida y su atención al cliente te conquistarán.
El primero es un formato más restaurante de carta de carnes y pescados, ubicado en plena plaza, ideal para familias o grupos de amigos por su terraza. La Raclette es un local mucho más íntimo, sin exteriores, especializado en esta modalidad de fondue y parrilla para carne y embutidos deliciosos con generosas guarniciones. En ambos, la carta de postres es ineludible; da igual cuanto hayas comido, te tentarán sin remedio. Para coronar la visita, las copas del final de jornada esperan en el moderno local Cara Norte.
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Escapadas a menos de 60 minutos
Chinchón: El destino más castizo
Si aún no conoces su plaza medieval enmarcada por un edificio de tres plantas y con más de 200 balcones de madera llamados claros, este fin de semana ya no hay excusa. Cuando pases por sus soportales recuerda que muchos balcones no pertenecen a la vivienda que preceden, y a veces son solo estancias para eventos.
A pie desde la plaza irás al encuentro de la Torre del Reloj nada más cruzar uno de sus arcos más bonitos. Es el único resto de la iglesia de Nuestra Señora de Gracia del siglo XIV, destruida en la Guerra de la Independencia. Al lado está el Teatro Lope de Vega, que se levantó sobre los restos del Palacio de los Condes de Chinchón. Le sigue la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, el centro de culto actual, que se empezó a construir en 1534 y reúne estilos gótico, plateresco, renacentista y barroco.
Por último, y haciendo honor al refrán "Anís, plaza y mesón", no te olvides de probarlo todo sentado al arropo de la plaza. Tampoco de llevarte las famosas “pelotas de fraile” o “tetas de novicia” de vuelta a casa. Para parar a comer, cualquiera de los restaurantes de la plaza será una buena elección. No en vano, es lo más castizo de Chinchón.
Buitrago de Lozoya: Un pueblo medieval de película
Parece que estuviéramos colándonos en el rodaje de Juego de Tronos pero este pueblo medieval es muy anterior al fenómeno de HBO. También lo son su impresionante muralla que rodea el centro histórico y su Castillo. Completa la postal el pantano del río Lozoya, como un foso alrededor de la fortaleza que regala una panorámica de cine cada atardecer.
La Plaza de la Constitución suele ser la primera parada también para el aperitivo, si la hora acompaña. Está repleta de terrazas de los mesones y restaurantes que sirven ininterrumpidamente. Desde aquí se ve la torre del reloj, que forma parte de la muralla medieval. Una combinación de cantos, piedra y ladrillo mudéjar, ya que árabe fue su origen para la defensa de Al-Andalus contra los cristianos.
La muralla está salpicada por 12 torres que asomas levemente del interior del recinto. Pasando por la puerta del lateral accesible, se llega al casco antiguo donde destacan la iglesia de Santa María del Castillo y el propio Castillo. Esta iglesia se levantó en 1321 y su única nave está decorada con artesonado mudéjar. El Castillo es posterior a la muralla, mandado construir en el siglo XV por los Duques de Mendoza, y parte de sus muros lo son también del edificio. No dejes de recorrer esta joya de la arquitectura cámara en mano, hay mil rincones que inmortalizar.
Tras esta selección de algunas de las escapadas cerca de Madrid, ya sabes cómo responder a la eterna pregunta de qué hacer este fin de semana. Ahora solo tienes que planear la mejor ruta para visitar la localidad que más te interese ¡y disfrutar! Como ves, las vacaciones de verano están tan cerca como te propongas.
