Dice el dicho popular que a nadie le amarga un dulce. Y es que el caramelo es uno de los alimentos que más le gusta a la gente de todo el mundo. Aunque hace tan solo unos años eran un lujo que solo unos pocos se podían permitir, hoy en día los consumos prácticamente a diario (y, en muchas ocasiones, en exceso). Hoy, como cada 4 de noviembre, celebramos el Día Mundial del Caramelo. ¿Pero qué se conmemora durante esta jornada?
¿Cuál es el origen del caramelo?
El origen del caramelo se remonta a los médicos sumerios, que elaboraban una pastilla endulzada a base de extracto de menta pipetina y carbonato para aliviar las indigestiones. Se considera que los egipcios hicieron el primer caramelo duro de la historia en el año 1000 a. C. con su pastilla contra la tos. En la India surgieron las primeras golosinas basadas en caña de azúcar alrededor del año 250. Los griegos y los persas los llevaron a Europa cuando descubrieron que los indios hervían el jugo de la caña de azúcar para hacer porciones individuales, lo que ellos llaman khanda.
Sin embargo, los caramelos tal y como los conocemos hoy en día aún tardaron en aparecer. En Venecia comenzaron a elaborarse los caramelos de azúcar a mediados del siglo XIV, pero hasta el año XVI eran un producto prohibitivo, solo asequibles para la nobleza y la burguesía. Su precio tardaría 300 años en bajar, cuando estos dulces empezaron a consumirse en toda Europa.
A principios del siglo XIX, con el avance de la tecnología y el descubrimiento de la remolacha azucarera, los procesos de producción se abarataron y empezaron a fabricarse en masa. En 1850 los Estados Unidos iniciaron la producción industrial de caramelos, mejorando su estética y su calidad. Sin embargo, el caramelo no llegaría a España hasta el año 1930.
¡Caramelos para todos!
Los primeros caramelos eran muy rudimentarios y básicos, estando compuestos básicamente por azúcar en estado líquido, como el que podemos hacer en casa para endulzar nuestros postres caseros. Con el tiempo, pasaron de ser una medicina para los problemas digestivos a la que solo podían acceder los ricos a un dulce al alcance de todos los bolsillos. Y, aunque al principio todos eran prácticamente iguales, han evolucionado adquiriendo las formas más originales y creativas.
Se cree que el origen caramelo se debe a la necesidad de disponer de un pequeño alimento fácil de transportar que proporcionara energía rápida. La palabra procede del latín canna melis, que deriva de la caña de miel utilizada en los inicios para hacer caramelos primitivos.
Aunque el Día Mundial del Caramelo se celebra en multitud de países, este día cobra especial importancia en los Estados Unidos. Curiosamente, tiene lugar solo unos días después de Halloween, el día de los caramelos por excelencia.