La campaña de la renta está a punto de finalizar, pero aún nos quedan unas semanas para entregar la declaración. Si aún no has hecho los deberes y tienes una casa alquilada, atento, porque vamos a hacer un repaso de los principales gastos deducibles para los arrendadores de vivienda.
7 gastos deducibles para los arrendadores de vivienda
La campaña de la renta 2021/2022 ha llegado a su etapa final, pero eso no significa que los contribuyentes hayan dejado de tener dudas. Especialmente en lo que a deducciones se refiere.
Aunque todos queremos obtener el resultado más favorable en nuestra declaración de la renta, lo cierto es que la mitad de los españoles tiene miedo a cometer errores. Ya sea por desconocimiento o por el temor a las sanciones, muchas veces los contribuyentes pasan por alto las posibles deducciones a aplicar en el modelo 100.
En el caso de los propietarios de inmuebles en alquiler, existen diversos gastos que se pueden desgravar. Estos son los más importantes.
1. Seguros
Son deducibles las primas de los seguros relacionados con la vivienda arrendada siempre que sea el arrendador el que paga las cuotas. Por ejemplo, el seguro del hogar, de responsabilidad civil, del alquiler...
2. Impuestos
Se pueden deducir todos los tributos y las tasas no estatales que haya que pagar por la vivienda y que incidan sobre los rendimientos, excepto las sanciones. Aquí entra el IBI, el alumbrado, la tasa de basuras...
3. Suministros del hogar
Luz, agua, gas, internet... Estos gastos también son deducibles si los paga el propietario.
4. Gastos de reparación y rehabilitación de la vivienda
Los gastos de reparación y rehabilitación también son deducibles. Por ejemplo, pintura o sustitución de elementos. Las mejoras o ampliaciones de la vivienda no entran, aunque pueden dar lugar a gastos por amortización.
5. Amortización del inmueble
También se pueden desgravar los gastos correspondientes con la amortización del inmueble arrendado si responden a su depreciación efectiva. Hacienda valora esta deducción en un 3% anual sobre el mayor valor entre el coste de adquisición o el valor catastral (sin tener en cuenta el valor del suelo).
6. Servicios profesionales y cantidades devengadas por terceros
Si el propietario contrata los servicios profesionales de una empresa para formalizar el alquiler o redactar el contrato de arrendamiento, se podrá deducir los gastos. Aquí también se incluyen gastos de terceros que presten servicios sobre el inmueble directa o indirectamente, como vigilancia, administración o jardinería, entre otros.
7. Intereses del préstamo hipotecario
Si la vivienda se ha adquirido mediante una hipoteca, los intereses pagados al banco durante su amortización son deducibles. Además, también son deducibles otros gastos financieros.